17 mayo, 2016
Seguridad con coste

Desde estas líneas hemos hablado en repetidas ocasiones de la dificultad que los inversores con perfiles conservadores tienen para rentabilizar sus carteras. Un entorno con tipos de interés tendiendo a cero, donde la retribución de un instrumento tradicional como los depósitos a plazo es inexistente, y donde las sistemáticas actuaciones de los bancos centrales han generado el fenómeno “represión financiera”, provocando tipos artificialmente bajos y rentabilidades negativas en emisiones de renta fija tradicionalmente incluidas en las carteras de estos perfiles de inversión, exige de un mayor esfuerzo para tecnificar la gestión del patrimonio y ampliar el abanico de activos a incorporar a sus carteras, lo que no implica abandonar el perfil conservador en su gestión.